jueves, 11 de mayo de 2017

Y TAL VEZ QUIZÁS...





Y TAL VEZ, QUIZÁS...



Y sigo la marcha

y miro la senda

y el sol que declina

ya su cabellera

cubriendo de rojo

la encrespada cresta

que de blanco armiño

lucía la sierra.



Ni sé mi destino

ni sé cuándo llega,

por eso el instante

que por mí no espera

procuro llenar

de cuanta belleza

y de cuanto amor

encuentro en la Tierra.




Y tal vez, quizás…

quizás sean mis huellas

las que un día, tal vez,

queden en la senda

cuando llegue al fin

exhausto y sin fuerzas

al fin del camino

en que está la meta.




Mas no tengo prisa

por gozar siquiera

del grato remanso

que sé que me espera

cuando al fin descanse,

exhausto y sin fuerzas

andado el camino,

en la madre tierra.


Antonio Capilla Loma, PIEDRA DE LA HONDA, Editorial VITRUVIO,.